10 de abril de 2013


 COMIENZA LA PRIMAVERA 

   Empieza una de las mejores estaciones del año. La primavera ya está aquí y enseguida estaremos en el veranito!!  Qué ganicas tengo este año.
   Ya os contaré por qué ;))

   En este post quiero presentaros una receta propia de este época.
   Es muchas veces cena para mis invitados y para mí misma porque la verdad es que se elabora en un pispás e incluso puedes dejarla medio preparada de un día para otro.

   Además, aunque puede parecer demasiado sencilla su contraste de sabores sorprende a tod@s.



ARROZ CON COCO



 INGREDIENTES PARA CUATRO PERSONAS

  • 400  grs de arroz basmati blanco o integral.
  • 150 grs de orejones.
  • 80 grs  de piñones.
  • Dos dientes de ajo.
  • Un puñado de coco rallado (al gusto)
  • Un dadito de mantequilla.
  • Aceite de oliva.
  • Una pizca de sal.


MODO DE ELABORACIÓN

   Primero ponemos a cocer el arroz. Si es blanco se hace del modo tradicional, con agua caliente. Pero si utilizáis el integral un truco para que quede más tierno y se haga antes es poner el arroz en agua fría y llevarla a ebullición. Sólo necesitará unos cinco minutos más que si es blanco para quedar hecho.

   Luego, apartamos el arroz cocido una vez le hayamos dado un baño de agua fría en una escurridera.

   En una sartén, rehogamos en aceite los ajos cortaditos. Los sacamos cuando estén dorados y hacemos lo mismo con los orejones. Cuidado, porque como éstos son dulces, si los quemáis tienden a amargar. Hacedlos poco a poco.

   También doramos los piñones.

   Ahora, ya podemos poner todo junto: el arroz cocido, los piñones, los ajos y los orejones. Les añadimos como una cucharada sopera de mantequilla, eso va al gusto. Y una pizca de sal.

   Tras quedar todos los ingredientes integrados, ponemos tanto coco rallado como nos guste. Yo os recomiendo que empecéis por poco y vayáis probando.

   Rehogad a fuego lento para que se mezclen todos los sabores.






   Cuando no tengáis mucho tiempo, podéis dejar el arroz cocido guardado en la nevera. Y hacer todo lo demás a última hora.


Podéis servirlo tanto templado como frío. Es una perfecta cenita, o una comida a orilla de la playa. Es un plato muy ligero, nutritivo y fácil de hacer.

   Incluso puede servirse como guarnición de una carne ligera, como una pechuga de pollo.


   Es una receta que sorprenderá a vuestros invitados!!



Y ¡¡¡¡ya está!!!!


   



 Un millón de besos!!